Disculpe que hoy le
escriba; solo han pasado unas cuantas horas desde la última vez que consigue
hundirme en sus ojos, desde que mis
torpes manos acariciaron sus manos y su rostro, desde que sus pulcros labios
con un beso me llevaron al paraíso,
desde que mis oídos dejaron de serlo sordos con una sola de sus palabras. Solo han pasado unos
pocos segundos desde que mi boca ha susurrado su nombre seguido de un te amo,
rogándole a los dioses lo lleve hasta usted. He perdido la noción del tiempo
para que este no me acongoje y que mis brazos no se sientan vacíos con las
ganas inmensas de abrazarle aunque fuese un efímero instante.
Deseara no ser mortal, tener que ofrecerle. Solo poseo lo que llevo conmigo, un corazón que ni siquiera es mío, un alma que nunca negué tenia pero nunca entendí para que servía. Tengo un sin número de defectos y escasas virtudes. Soy idealista sentada los pies en la realidad que ansía vivir con usted, si lo permite. Soy un caos total, soy cobarde con ansía de valentía.
Oh mi amado ángel… Agradezco… los instantes que me brinda, la
felicidad que alberga en mi ser, los te amo que me canso escuchar, las caricias
que ha dejado plasmada en mi piel, los besos que sensibilizan, las miradas que
cautivan, los momentos de silencio que comparte, las risas que calman, las
angustias que comparte, su existir, su vivir, el enseñarme a ser, a existir junto a usted…
Le amo…
Att: Su Despiste
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